A menudo siempre me preguntan: “¿Qué pasó con los apóstoles y otros discípulos después del Nuevo Testamento?” Aunque muchos de nosotros estamos familiarizados con las vidas de los cristianos tal como se relata en la Biblia (especialmente los Hechos de los Apóstoles y las cartas de San Pablo), aun son muy pocos los que conocen el resto de la historia. Afortunadamente, hubo un hombre que decidió hacer una crónica de la vida de los Apóstoles y de los discípulos originales de Jesús. Su nombre es San Eusebio Pánfilo. Nacido en el año 260 DC, fue uno de los primeros historiadores de la Iglesia. Gracias a él, tenemos relatos de la vida de los Apóstoles, así como de muchos acontecimientos importantes y personas que fueron cruciales para la formación del catolicismo. El libro de Eusebio se titula La Historia Eclesiástica. No es nada menos que fascinante. Los primeros trece capítulos dan un breve resumen de Jesucristo y Su vida. La segunda parte del libro es donde San Eusebio detalla los hechos de los Apóstoles después de la Ascensión de Jesús. Empieza contando la historia de Santiago y su martirio, seguido por una serie de relatos sobre los Doce Apóstoles, Poncio Pilato y varios de los primeros obispos. El capítulo uno del libro II empieza con un relato del martirio de Santiago en la ciudad de Jerusalén. A esto le siguen innumerables historias de heroísmo de los primeros cristianos de todo el mundo, desde Siria hasta la Galia (la actual Francia). También oímos hablar de las hazañas de los apóstoles en su misión de evangelización: milagros, predicaciones y enseñanzas. Eusebio también nos cuenta sobre los papas que sucedieron a Pedro. Por ejemplo, en el capítulo dos del Libro III leemos que “después del martirio de Pablo y Pedro, Linus fue el primero en recibir el episcopado de Roma”. Otra contribución esclarecedora del libro de historia de Eusebio es su descripción de las muchas herejías que rodearon a la Iglesia primitiva. Sabemos que los hombres y mujeres que practicaron su fe católica en los primeros siglos fueron constantemente tentados por falsas enseñanzas: El arrianismo, el apolinarianismo, el maniqueísmo, el sabelianismo, etc. Eusebio describe magistralmente estas herejías y el pensamiento de sus fundadores. También nos habla de los obispos y sacerdotes que los combatieron, el más famoso siendo San Ireneo de Lyon. La Historia Eclesiástica termina con el emperador Constantino y su legalización de la religión cristiana alrededor del año 324 d.C.